167. 📍Una multitud acompaña a los niños
#FatimaParaHoy
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🙌🏼 Para el momento en que nuestra Señora se apareció el 13 de julio, la noticia sobre las apariciones ya se había difundido por todo Portugal. Muchas personas creían que los niños estaban diciendo la verdad, pero había también muchos que dudaban de ellos; algunos por sus creencias ateas y otros porque pensaban que las visiones venían del diablo. A pesar de todo ello, cuatro mil personas estaban presentes en la Cova para la visita de nuestra Señora el 13 de julio.
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🙏🏽🙏🏽🙏🏽 Muchos de los presentes estaban rezando el Rosario cuándo nuestra Señora se apareció más arriba de la encina.
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1️⃣,2️⃣,3️⃣ Al comenzar la aparición, Lucía le planteó a nuestra Señora tres inquietudes:
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1️⃣ La primera era su pregunta habitual: “¿Qué quiere usted de mí?” En su respuesta, nuestra Señora repitió cosas que ya les había dicho a los niños: que volvieran el día trece del mes y que rezaran el Rosario todos los días. Una vez más, nuestra Señora enfatizó el poder y la importancia del Rosario para obtener la paz del mundo, pero añadió dos frases nuevas: “en honor de Nuestra Señora del Rosario...”porque solo Ella puede ayudarles”.
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✨ (Más adelante Lucia había de revelar que Jesús le dijo que Él había puesto la paz del mundo en las manos y en el corazón de su Madre! Jesús desea que alcancemos la paz del mundo con la ayuda y la intercesión de nuestra Señora).
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2️⃣ La segunda inquietud de Lucia brotaba del escepticismo de su familia, especialmente de su madre, y de la forma en que la ridiculizaban ciertas personas que no creían en las apariciones. “Quisiera pedirle que nos diga quién es usted, y que haga un milagro para que todos crean que usted se nos está apareciendo”.
En mayo, María dijo a los niños que solo “más adelante” les diría quién era ella. Esta vez les dijo que sería en octubre cuando revelaría su identidad y también realizaría un milagro para ayudar a la gente a creer en la realidad de las apariciones.
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3️⃣ Finalmente, Lucia pidió favores para diversas personas; el número de peticiones de favores tanto espirituales como materiales había aumentado. La respuesta de nuestra Señora fue que era necesario que esas personas rezaran el Rosario para obtener las gracias solicitadas.
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Fuente: Fátima para hoy. Pag. 61
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