ENSEÑANZAS PRIMERA APARICION 4 REPRACION CONVERSION

ENSEÑANZAS DE LA PRIMERA APARICIÓN 13 DE MAYO 1917
REPARACIÓN POR EL PECADO Y LA CONVERSIÓN DE LOS PECADORES.
La Virgen pregunta a los niños si quieren ofrecerse a Dios, soportando todos los sufrimientos que él quiera enviarles, en reparación por el pecado y por la conversión de los pecadores.
¿Cómo es posible que la Dulce Madre, la que es Vida, Dulzura y Esperanza nuestra, pida eso a unos pequeños?
Esto sólo se puede entender a la luz de la cruz de Cristo, y a la luz de muchas verdades de fe que ya no estamos acostumbrados a escuchar.
Aquí tenemos a la Madre de todas las madres, a la más tierna de todas las mujeres, invitando a niños a compartir la pasión de su Hijo por la salvación del mundo.
🔷 PARA MEDITAR:
El mayor bien para la humanidad, desde el punto de vista de Dios y de María Santísima, es la salvación eterna de las almas.
Todos los sacrificios que se tengan que hacer para este propósito tienen sentido y valen la pena.
Nuestros dolores, unidos a los dolores de Cristo en la cruz, se convierten en causa de salvación para nosotros y para los demás.
Ave Maria!
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4 Comentarios
Rebeca Medina Lago · 12 de junio de 2022 at 11:11 PM
Una cosa es perdonar otra purificar o reparar
Ana · 12 de junio de 2022 at 11:01 AM
No entiendo: Cómo que reparar los pecados ya perdonados en confesión?
Equipo Fatimazo Por la Paz · 12 de junio de 2022 at 8:52 PM
Hola! Nuestra Señora nos pide ofrecer nuestros sacrificios para reparar los pecados de otras personas. Todos formamos el cuerpo místico de Cristo, por lo que nuestro pecado individual afecta a todo el Cuerpo, así como la reparación se aplica también. No tenemos idea cuanto bien puede hacer a las almas un solo ofrecimiento y/o sacrificio en reparación y por la conversión. Ave María!
Rebeca Medina Lago · 12 de junio de 2022 at 11:22 PM
La Iglesia distingue en su enseñanza dos tipos de PENAS:
– la PENA ETERNA, es decir la condenación de la que somos rescatados por el bautismo y por la reconciliación o confesión recibida con arrepentimiento sincero.
– la PENA TEMPORAL, que es consecuencia del pecado y que debemos purificar aquí en la tierra con nuestras buenas obras y sacrificios o, si no lo logramos aquí, entonces lo haremos en el Purgatorio.
La confesión nos quita la pena eterna, pero no la pena temporal. La indulgencia es la remisión parcial o total de la pena temporal que la Iglesia, con el poder de atar y desatar, concede a los fieles que realicen determinados actos.