🔴 En este nuevo año que comienza tendremos una pequeña publicación diaria sobre las diferentes festividades o advocaciones Marianas que se celebran en diferentes partes del mundo.
Primero es bueno recordar que a Dios se le rinde culto de LATRÍA o ADORACIÓN, a La Santísima Virgen se le rinde culto de HIPERDULÍA o VENERACIÓN, a San José PROTODULÍA y a los santos DULÍA.
Los elementos del culto a María se pueden definir de veneración porque se reconoce la excelencia de la Madre de Dios.
Amar a Cristo es amar a María. Amar a María es amar a La Iglesia de Cristo .
A María se le invoca como intercesora, e imitación de las virtudes.
La importancia de la devoción Mariana siempre ha sido clara en la vida de la Iglesia; el tema de las Advocaciones Marianas concentra todo el estudio de la Mariología porque es una realidad dentro de la Historia de la Salvación.
La palabra “advocación”proviene de latín avocare y hace referencia a la invocación y al hecho de dirigirse a alguien en específico; en la práctica histórica varía de forma pero en el fondo es la misma esencia.
Esto ocurre con la imagen de la Virgen María, quien es diferente en cada región pero que es la misma Virgen María, la madre de Jesucristo y de la iglesia y, cuando el fiel se dirige con amor a esa imagen específica , se está dirigiendo en realidad a la Virgen María que vive en el reino de Dios.
El amor que experimenta es el mismo amor a María y, todos los creyentes, aunque la llamen en diversas advocaciones, viven un único amor a Dios y a María y están unidos en ese amor.
Durante la historia de la iglesia se han ido acumulando una gran cantidad de diversas advocaciones Marianas, desde la Virgen del Pilar, aparición que ocurrió en España en el tiempo de los apóstoles cuando María estaba viva todavía, hasta las apariciones actuales pasando por Guadalupe, Coromoto ,Lourdes,Fátima,Aparecida, Luján, entre miles de otras advocaciones.
*El motivo o el origen de cada advocación varía; siempre se trata de hechos extraordinarios, milagrosos y relacionados con la vida de María donde el pueblo de Dios reconoce la intervención de la Madre de Jesús. *
Después el pueblo se encarga de hacer suya esta realidad, esta intervención especial de la Virgen y se va creando la advocación correspondiente, hasta consolidarse definitivamente en un título, en una forma específica, en general cada intervención de María tiene que ver con una realidad histórica precisa, con una necesidad particular del pueblo de Dios.
Lo cual, una vez más, demuestra la labor maternal de María que se tomó muy en serio el mandato de su hijo en la cruz.
Cada advocación Mariana es una historia propia que tiene un gran significado para cada pueblo y nación que la practica.
0 Comments