«A tí, Señor, me acojo; no quede yo nunca defraudado; sácame de la red que me han tendido, porque tú eres mi amparo.» (Sal 30, 2.5)

Oración

Concédenos, Dios todopoderoso, que, purificados por la penitencia cuaresmal, lleguemos a las fiestas de Pascua con perfecto espíritu de conversión. Por Nuestro Señor Jesucristo. Amén.

Categories: Fatimazo

0 Comments

Déjanos un comentario